¿Qué es lo que más te gusta hacer? ¿Leer? ¿Cocinar? ¿Ver una película en televisión o estar tirado en el sofá mirando el techo? Pues enhorabuena, ya sabes lo que es el hygge y la decoración tiene mucho que decir.
Esta palabra danesa es el término de moda, y hace relación al arte de disfrutar de los pequeños placeres de la vida. Estar en casa feliz, haciendo tus cosas favoritas en un entorno cómodo y agradable. Eso es la esencia de la vida y la clave del estilo hygge.
Y esto es lo que nos vamos a proponer. Con muy pocos detalles, pero elegidos con cariño, conseguiremos que llegar a casa sea lo mejor que nos pueda pasar en el día.
5 consejos para decorar al estilo hygge
1. Disfruta de tu casa. Imagina despertar en una casa de ensueño, cómoda y lista para disfrutar cada rincón con ganas e ilusión. No necesitas una casa grande, o exterior, o con terraza. Cualquier sitio puede convertirse en un pequeño paraíso utilizando nuestra imaginación y un par de detalles de estilo.
2. Líbrate de todo lo que sobra y haz rincones para disfrutar de tu hogar. Puedes buscar una esquina para montar una zona de lectura. O puedes crear un espacio para jugar o para recibir amigos. El límite lo pones tú. Seguro que puedes inspirarte en internet para coger ideas originales y sencillas.
3. Decora de manera sencilla, pero acogedora. La clave de este estilo de decoración es la sencillez. Para ello, utilizaremos colores blancos o colores neutros para muebles, accesorios y paredes. Esto creará una sensación de amplitud y, de paso, eliminaremos el ruido visual, clave para vivir en armonía y calidez.
Las cortinas y estores son una pieza fundamental en cualquier decoración, y más en un país tan soleado como España. Una cortina o unos estores enrollables elegidos con mimo pueden convertirse en el centro de la decoración de una estancia.
Por ejemplo, usa estores opacos de lino para librarte del sol en las horas de más calor. O utiliza un estor traslúcido para lograr el efecto contrario, es decir, que llegue más luz natural a las zonas interiores o sombrías. Créenos, la forma en la que entra la luz por una ventana puede convertirse en una obra de arte si elegimos un elemento clave que las cubra. Así conseguiremos difuminar la luz.
4. Utiliza velas para iluminar. La calidez de la luz de una vela es un placer que no te debes negar en tu hogar. Usa velas blancas de diferentes tamaños en el salón o en el baño. Imagina un baño caliente escuchando tu música favorita bajo la luz de las velas…
5. Dales todo el valor que merecen las pequeñas cosas de la vida. El amanecer, la lluvia en una tarde domingo, una jornada de spa casero o tomarnos un chocolate caliente a la luz de las velas. Todas estas actividades relajantes pueden convertirse en el mayor de los placeres si disfrutamos de ellas al máximo.
Nosotros ya hemos sucumbido a los encantos del hygge. Vivamos la vida con calma y disfrutando de cada momento como si fuera único. Porque nos lo merecemos.
[…] 6. Debido su particular diseño en líneas horizontales, los estores noche y día aportan un toque original a tu hogar, un estilo elegante, acogedor y contemporáneo que es acorde con casi todos los hogares. Además de proyectar una agradable sombra rayada muy “hygge”. […]